Ocultismo Oriental

El hombre mejor adaptado para progresar en ocultismo es el que en todo evita los extremos y aunque en lo principal se inclina a cierta modalidad de yoga, tiene un conocimiento general de las diferentes fases de la filosofía.

Al fin, el hombre debe pulimentar todas las facetas de su carácter y por lo tanto no ha de desdeñar ninguna en el transcurso de la evolución. Así evitaremos el ver unilateralmente las cosas y nos liberamos del fanatismo, la estrechez, la obcecación y la intolerancia". Yogi Ramacharaka

Analicemos la propuesta de la reencarnación. Esta corriente de pensamiento espiritual no es nada reciente, ni una moda pasajera, ni tan conocida en general como se pudiera pensar. La reencarnación es y ha sido una creencia muy arraigada en diversas culturas, defendida desde la antigüedad y que cuenta actualmente con infinidad de seguidores. Aunque se pueda pensar que nació en la India, no surgió de allí. Si vamos hacia atrás en el tiempo, vemos que los griegos, mucho antes de la expansión del Cristianismo, ya la conocían. Así mismo, con mucha anterioridad, existía en Mesopotamia, donde los caldeos la observaban como doctrina principal. También los persas creían en ella, así como los egipcios, 3.000 años antes de Cristo, y toda la cuenca del Mediterráneo. Hoy en día sigue en perfecto vigor gracias a una cantidad innumerable de seguidores en todas partes del mundo. "No hay Muerte. Sólo hay Eterna, Sempiterna Vida." Esta frase es del Yogui Ramacharaka, célebre ocultista oriental, autor de varios libros y uno de los grandes maestros espirituales de todos los tiempos. Es una cita suya que aparece en su libro "La vida después de la muerte", y que creemos que resume el espíritu de la creencia en la reencarnación.

Tomando como buena referencia al citado Yogui Ramacharaka, lograremos entender mejor la doctrina que nos ocupa, viéndola desde el punto de vista del ocultismo hindú.